La Des-es-tructura

El «desecho» tiene en su naturaleza la idea de exclusión, lo inservible que ha terminado su vida útil y ya no tiene pertenencia.

Mi desafío es re-significarlo apelando a lo sensible, intuitivo y dinámico manteniendo una tensión en la reinvención estética que puede llegar hasta a la sacralización.

El lenguaje opera desde la acumulación y la reiteración pero mostrándolo a través de diferentes lenguajes que crean una cadena de asociaciones vinculantes.

En mi búsqueda de esta re-significacion en la cultura de los acopios de desechos constructivos, lo des-estructuro y lo llevo hacia un lugar en el arte para que desde ahí admitirlo, darle una cara visible y entonces dignificarlo y llevarlo también a la frontera de lo poético.

DES-TRUCTURAS, por Ernesto Muñoz

En las laderas de la cordillera de los Andes se encuentra el taller de Amelia Errázuriz, una bella casa que hospeda los trabjos al óleo que la artista produce con rigor y serenidad.

Errázuriz pinta obras que no ocultan su origen e arquitecta derrochando sabiduría al expandirse en el color. No es fácil absorber una obra que recoge la experiencia de un territorio y los quiebres de los materiales provenientes de la naturaleza a los cuales el rigor de la tierra nos coloca como testigos de la esencia de la patria, tributaria de los sismos.

Desobedeciendo las nominas del buen decir que es el gusto, arroja hasta el dorado a objetos encontrados y colocados como testigos del tiempo que aparecen en sus obras.

En esta exhibición, que es su segunda en Lima Perú, demuestra su categoría de artista en un universo que cada día es más amplio.

Amelia Errázuriz es una artista constante con su trabajo, que ha buscado un camino propio y un lenguaje lleno de sugerencias que la colocan como un brillante ejemplo de la evolución del arte en Chile.

Ernesto Muñoz M.
Crítico de Arte
Noviembre 2011